Tras cerrar el año 2021 con cifras de inversión récord, el sector tecnológico arranca 2022 con nuevos unicornios y una perspectiva optimista para el ecosistema de Barcelona. Los proyectos y la inversión ya no entienden de fronteras, y esta es una tendencia bidireccional, que posiciona a la industria emprendedora e inversora local. Para los nuevos proyectos, tener impacto ya no es opcional, sino un punto de partida imprescindible; la disrupción tecnológica en sectores tan regulados como salud, movilidad o fintech obliga a la Administración a encontrar su nuevo rol; y la gestión de los datos se convierte en un pilar estratégico.

En la primera mesa redonda de 2022, hablamos de estas tendencias desde las perspectivas de startup, corporación, capital riesgo e institución, y de los sectores de movilidad, fintech, salud e inversión; con la participación de: 

• Silvana Churruca, CEO de Payment Innovation Hub, un centro de innovación creado por CaixaBank, Global Payments Inc., Samsung, Visa y Arval para crear soluciones de pago. 
• Noemí Moya, directora de Relaciones Institucionales en Voi Technology para España, Francia, Italia y Bélgica, una empresa sueca de movilidad sostenible que ofrece patinetes eléctricos y bicicletas compartidas. 
• Montse Daban, directora Científica y de Relaciones Internacionales en Biocat, la entidad catalana dinamizadora del sector de las ciencias de la salud.
• Carlos Trenchs, cofundador y director gerente de Aldea Ventures, una plataforma de capital de riesgo europea con sede en Barcelona.
• Miquel Martí, CEO de Tech Barcelona.

Los proyectos y la inversión ya no entienden de fronteras

Como consecuencia de la creciente interconectividad entre ciudades, las fronteras han dejado de tener un peso relevante a la hora de invertir y desarrollar proyectos. Como comentó Carlos Trenchs, en Barcelona, por ejemplo, el 60% del capital invertido en startups en fase inicial durante 2021 provino de agentes internacionales: “Hace unos años, el capital provenía -en su mayoría- del entorno local. En la actualidad, hay inversores globales fijándose en iniciativas promovidas por personas con experiencia y una visión global”.

El efecto de las fronteras puede ser de doble filo. Mientras por un lado se desvanecen, por otro, el Brexit tiene también efecto. Montse Daban aseguró que “muchas empresas británicas del sector medtech han llegado a Barcelona, con el objetivo de mantener su presencia en Europa y abrir la puerta de entrada a otros mercados como el latinoamericano”. 

La personas en el centro

Tener impacto en la sociedad ya no es una opción, sino un punto de partida imprescindible en todo proyecto. Una perspectiva que comparten otros sectores productivos e industriales. Las empresas deberán crecer en un entorno con propósito, donde las personas estén en el centro de la toma de decisión y estrategia de negocio.  “La transformación digital no puede dejar a nadie relegado, es decir, la accesibilidad y la inclusión en los sistemas de pago debe estar garantizada para todo el mundo. Nuestra responsabilidad sobre el usuario y el apoyo al pequeño comercio local son requerimientos que han llegado para quedarse, y a los que debemos dar respuesta”, afirmó Silvana Churruca. 

En ese sentido, Noemí Moya expresó el objetivo compartido de “crear ciudades para vivir mejor: con menos emisiones, ruido, congestión, y con un servicio de transporte multimodal que ponga al ciudadano en el centro”. “Vemos la movilidad como un servicio a medida de la sociedad”, concluyó Noemí.

Desde la perspectiva de la salud digital, la situación pandémica ha situado el sector healthtech en una posición de relevancia sin precedentes, que sin duda seguirá fortaleciéndose durante los próximos años. Montse Daban prevé un crecimiento del 15% en el valor de la industria para 2028, que deberá superar los retos existentes en materia de “búsqueda de talento y consolidación del crecimiento” para materializarse.

La administración deberá encontrar su rol en la nueva realidad

Todos los ponentes señalaron la necesidad de generar un marco regulatorio adaptado a las nuevas necesidades del mercado, por lo que la colaboración público privada será esencial. Para Noemí Moya, “aunque el sector de la movilidad urbana cuenta con la tecnología necesaria para garantizar la seguridad de los usuarios, la infraestructura no está adaptada y falta una regulación clara y homogénea por parte de la administración. Necesitamos colaborar con ella, a través de la transferencia de conocimiento, para que la movilidad sea prioritaria en la planificación urbanística de las ciudades”. Asimismo, Silvana Churruca cree que “la regulación debe acompañar el crecimiento y el impulso, con tal de seguir explorando y avanzando”. “Ante nuevos retos disruptivos como el blockchain, los NFTs o el metaverso, el orden es necesario pero, a su vez, debe permitirnos movernos con fluidez”, añadió. 

La consolidación del data driven policy

La tecnología actual nos da acceso a una gran cantidad de datos. Para los ponentes, el futuro pasa por ser capaces de incorporar esta información en la toma de decisiones. “Nos estamos acostumbrando a entender los resultados de nuestra actividad: cada día nos levantamos con datos de salud, las empresas de movilidad tienen datos de emisiones, y las compañías de pagos conocen qué actividades económicas funcionan mejor”, expresó Carlos Trenchs, afirmando que “los inversores quieren invertir en acciones cuyo impacto se pueda medir”. 

TheNewBarcelonapost se ha hecho eco de la sesión en el siguiente artículo.