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Dídac Lee: El grado de ambición de los proyectos limita más que el ámbito geográfico
Para Dídac Lee, emprendedor desde hace más de 20 años y ahora inversor, el ecosistema digital de Barcelona necesita atraer talento multicultural y multinacional. Para ello es necesario crear proyectos internacionales que resulten atractivos a estos profesionales. A lo largo de sus más de 23 años de experiencia como emprendedor ha creado compañías de éxito entre las que destacan Fhios, Inspirit, Scubastore (actualmente TradeINN) de las que es cofundador y accionista.
Una amplia trayectoria que ahora ha puesto al servicio de Galdana Ventures, el fondo de inversión creado junto con Marcel Rafart, Roque Velasco y Javier Rubió que invierte en otros fondos de inversión a nivel global, en especial Silicon Valley, China y Europa. Con este proyecto emprendedor, Lee ha cambiado el rol emprendedor por el de inversor. Sus múltiples viajes y su experiencia internacional así como su idiosincrasia multicultural le han puesto en contacto con parte de los mejores fondos internacionales en los que ahora invierte con Galdana. En 2017 entraron en más de 30 fondos tecnológicos de todo el mundo con 275 millones de euros.
De una entrevista sobre su larga trayectoria en proyectos de Internet además de su experiencia profesional haciendo negocios por todo el mundo, hemos extraído algunos puntos clave.
La ubicación pierde importancia
“En el sector en el que estamos la ubicación cada vez es menos importante”, comenta Dídac Lee que se inició como emprendedor en Figueres, su pueblo natal. “Desde Barcelona es posible ser inversor en las mejores compañías a nivel global y disfrutando de un entorno tan privilegiado como el que tenemos”, asegura Lee. Por eso, entre los aprendizajes que le gustaría transmitir a otros emprendedores se encuentra la potencia que tiene un lugar como tractor de talento desde todo el mundo y cómo desde un sitio se puede estar haciendo negocios en todo el mundo. “El ámbito geográfico es cada vez menos limitante, lo que limita es el grado de ambición de los proyectos”, explica. Cada vez son más las empresas y proyectos de Barcelona que están recibiendo inversión de fondos americanos y fondos internacionales como es el caso de Badi o Glovo.
Auge del profesional multicultural
Aunque Barcelona es una ciudad muy atractiva, de hecho, según Atomico es la tercera ciudad europea elegida para emprender, uno de los puntos débiles de la capital catalana que no puede competir con otras ciudades como Londres, en la que es más fácil encontrar talento de diferentes nacionalidades. “Me doy cuenta de que cada vez las fronteras y los límites son más culturales que geográficos”, reflexiona Lee. “Creo que hay que tener una mentalidad más abierta al mundo, más global, intentar integrar más idiomas en los profesionales, poder pasar más tiempo en el extranjero”, asegura. En cuanto a la atracción de talento multicultural, sería necesario facilitarles el proceso ayudándoles, por ejemplo, con servicios de recolocación cuando llegan: búsqueda de vivienda, escuelas, etc.
El ecosistema como punto de unión
“Emprender en un sitio en el que estás solo, que no tienes un ecosistema creado, es más complicado”, explica Lee recordando sus inicios en Girona. En estos 20 años, las empresas se han ido consolidado y han aparecido un grupo de startups “más pequeñas, pero con mucho potencial. Un conjunto de compañías al que les faltaba algún tipo de eje vertebrador, un nexo de unión, y eso es justo lo que encontraron cuando nació Barcelona Tech City como asociación”, destaca este emprendedor multicultural. “Con un equipo ejecutivo muy potente, Barcelona Tech City está vertebrando y articulando todo el ecosistema que, actualmente, ya está en una fase consolidada, lo que es algo de lo que nos tenemos que sentir todos muy orgullosos”, asegura.
No obsesionarse con ser el próximo Silicon Valley
Cada vez son más reconocidas las empresas surgidas de Barcelona, algo que es muy importante y que no sucedía hace 10 años. “Barcelona puede aspirar a ser el mejor hub tecnológico de Europa, de los tres primeros, sin duda. Barcelona será un referente del mundo en temas tecnológicos y saldrán grandes empresas. Podemos ser un referente en esta industria, claramente, pero hemos de hacerlo acorde a nuestra realidad y nuestra idiosincrasia”, afirma. “No hay que obsesionarse con ser el próximo Silicon Valley. ¿De qué sirve ser el mejor hub tecnológico del mundo si tienes el aire contaminado o no puedes verte con tus amigos de la infancia? Y hoy en día, uno vive en un sitio y trabaja en donde tenga sentido. Poder salir y respirar, yo valoro esto por encima de ser el mejor ecosistema del mundo”.
Proyectos atractivos para atraer talento multicultural
Para Lee, Barcelona cuenta con una ventaja competitiva que no tienen otros países europeos: el clima. Pero al ecosistema le falta poder atraer talento multicultural y multinacional y para ello es necesario crear proyectos internacionales que resulten atractivos a estos profesionales. “Cuanto más global eres, más posibilidades de financiación puedes tener, más financiación en las rondas,…”, comenta el emprendedor.
De emprendedor a inversor
Tras su trayectoria como emprendedor, Lee se lanzó a invertir en otras startups, adoptando el rol de inversor. “Después de 20 años la motivación por crear algo nuevo no es tan grande como el intentar participar en proyectos muy interesantes. Antes me motivaba crearlo yo y ahora me motiva participar. Es un paso natural de muchos emprendedores, tras muchos años emprendiendo, poderse pasar al mundo de la inversión”, explica Lee, ahora al frente del fondo de inversión Galdana Ventures.
La importancia de los saltos cualitativos
Haber sido emprendedor implica entender cómo piensan, esa forma optimista de ver las cosas, y eso es algo que Lee aplica en su faceta como inversor y business angel. “La incomodidad, la necesidad y las situaciones de crisis son lo que hacen que los emprendedores hagan saltos cualitativos”, asegura Lee. Por eso, en su etapa como inversor intenta acompañar a los emprendedores, haciéndoles conscientes de las verdades que “tenemos que escuchar pero que hacen mucho daño y cuanto más daño hacen es porque son más acertadas”. En su caso, está seguro de que “cuando han metido el dedo en la llaga es cuando he dado un salto cualitativo hacia adelante”.
Ayudar a reflexionar para una buena ejecución
Alrededor de los emprendedores siempre hay otras figuras ayudándoles a tomar decisiones. La experiencia personal de los mentores o inversores, en muchos casos con experiencia emprendiendo también, no siempre es aplicable a otras personas, ya que la misma situación, con personas diferentes, es una situación diferente. No hay respuestas universales, ni manuales ni reglas fijas pero la experiencia es fundamental.
“Como decía Bruce Lee, el mejor maestro no es el que te da respuestas sino el que hace las preguntas correctas”, recuerda el fundador de Inspirit. En base a su experiencia, “los mentores/inversores han de hacer reflexionar a los emprendedores, que son quiénes realmente han de tomar las decisiones y ejecutarlas. Al final todo depende de una buena ejecución”.
Menos relaciones pero mejor desarolladas
En China hay un concepto Guanxi /Guānxi/ que diferencia entre conocer a gente y el nivel de relación. “Se puede conocer a una persona en un evento de networking pero el nivel de relación es débil. El tema no es conocer a alguien sino que nivel de relación tienes con esa persona”. Para Dídac Lee, las redes sociales como Facebook y Linkedin han devaluado el concepto de relación personal o profesional. “Menos relaciones pero mejor desarrolladas”, sentencia.
Durante sus muchos viajes por el mundo como emprendedor, Didac Lee ha establecido relaciones con otros mercados como Silicon Valley o China, experiencia que ha sido clave para poder conocer fondos de inversión internacionales. Se trata de unos fondos en los que es extremadamente difícil entrar. “Si eres exitoso con los fondos que has hecho, todo el mundo quiere poner dinero y se crea un exceso de demanda”, destaca Lee. “En China nuestro nivel de relación es muy alto porque previamente hemos hecho muchas relaciones allí y hemos trabajado con diversos fondos”.
Elegir al inversor en función del momento
“Si el emprendedor está en estadio inicial claramente tienes que ir a buscar el apoyo de Bussines Angels que básicamente le compren, compren a su equipo y compren su visión. Que crean en él y en su equipo. Cuando un emprendedor empieza a tener métricas, puede ir a un fondo más profesional. Mi recomendación es que comiencen con fondos locales porque hay muchos y son muy buenos”, remarca Didac Lee.