Michelle Greenwald es la CEO de Inventours y también directora del programa Tech Digital Marketing en Cornell. Escribe para Forbes acerca de innovación en todos los sectores y dirige varios programas empresariales en los que se busca la creatividad e innovación para mejorar las prácticas empresariales y productivas.

DESCRIPCIÓN DE LA ORGANIZACIÓN

Inventours es un hub de innovación; hay diferentes componentes. Michelle escribe para Forbes acerca de varios tipos de innovación: tecnología, arquitectura, diseño de producto y marketing. También escribió un libro de innovación llamado “Catalyzing Innovation”, que ayuda a las compañías a innovar en diferentes aspectos.

Las compañías a menudo se estancan en la forma como innovan y hacen las mismas cosas una y otra vez. Así que, inspirada en Ferran Adrià, pensó en 63 formas diferentes en las que las empresas pueden innovar. “Se puede innovar el modelo de negocio, los procesos, materiales, colores, formas… hay muchas maneras de hacerlo. De esta manera, yo facilito un camino sistemático en el que ellos pueden pensar más en general acerca de cómo pueden innovar”, señala. También imparte talleres y consultorías para compañías. Con Inventours, las empresas pueden tener una experiencia de intercambio creativo en diferentes industrias. “Hemos traído a varios grupos a Barcelona Tech City porque creo que es un lugar inspirador”.

DE TU TRAYECTORIA PROFESIONAL, ¿QUÉ APRENDIZAJES TE GUSTARÍA COMPARTIR?

Tres aspectos fundamentales: el primero es que los grupos multifuncionales son muy importantes. La ingeniería, I + D, ventas y marketing deberían estar involucrados en las ideas de nuevos productos desde el inicio, ya que de esta manera se evitan problemas en el futuro – todos pueden realmente contribuir.

El segundo, proporcionar muchos estímulos para traer ideas de un sector a otro es muy importante. Si las personas no salen de su país y sus industrias y nunca dan un vistazo a su alrededor, sus ideas serán mucho más limitadas.

El tercer aprendizaje es “falla pronto, falla rápido”. Muchas compañías van experimentando a lo largo del camino, probando ideas y aprendiendo de pequeños fracasos. De manera que cuando la idea llegue al mercado, no sufran un gran fracaso. Estas son las lecciones.

“Otra que considero importante, es que muchas startups están tan enfocadas en conseguir venture capital y en perfeccionar la idea de que no saben cómo comunicarlo a los consumidores y cómo maximizar las pruebas y el conocimiento. La forma en que describes tu idea, la comunicas y la vendes puede marcar la diferencia. Puede hacer que una idea realmente vuele”, añade Greenwald.

¿QUÉ RETOS PROFESIONALES AFRONTAS EN LOS PRÓXIMOS AÑOS?

Hay un gran reto para las startups, necesitan ser entrenadas: necesitan ser guiadas y pensar en todos los aspectos de la planificación de negocio. Ellos, de nuevo, necesitan ver las implicaciones legales, asuntos de distribución, de marketing, comunicación… Es importante que tengan el apoyo para pensar en el plan de negocio completo y no solo en el desarrollo del producto y en conseguir dinero.

En cuanto a la innovación hacia el futuro, es muy difícil ser único y diferente. Muchas aplicaciones se están desarrollando en estos momentos. Hay dos millones de apps en la AppStore de Apple. La consumidora promedio usa diez aplicaciones de manera regular. Muchas startups tienen un plan de negocio en el que tendrán que tener una estrategia de salida y serán compradas en su salida, pero ¿están realmente creando un negocio viable que pueda adaptarse al paso del tiempo? “Un gran problema – para bien o para mal – es que la tecnología se mueve tan rápido que es fácil quedarse obsoleto”, comenta. ¿Y cómo los negocios pueden escalar rápido e innovar constantemente? Ya no es posible quedarse quieto, es un mundo excitante pero muy difícil.